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Arte Rupestre

El primer testimonio que encontramos de la presencia humana en este territorio es el arte Rupestre Levantino. Los primeros pobladores de nuestro territorio, dejaron diferentes manifestaciones artísticas en Cretas, Mazaleón o Beceite. Son ejemplos destacados de parte de la cultura material prehistórica que más nos acerca al pensamiento humano.

La riqueza patrimonial de estas manifestaciones de arte rupestre resulta destacable no sólo por el número de estaciones rupestres sino por la calidad de algunas de las mismas. Estas tierras tienen el honor de contener el primer abrigo con arte levantino descubierto (Roca dels Moros, Cretas), Fue el arqueólogo calaceitano Juan Cabré quién descubrió en 1.903, en el Barranco del Calapatar en Cretas, el primer conjunto de estas manifestaciones pictóricas naturalistas en la “Roca dels Moros”. Pero junto a éste destacan otros de estilos y técnicas diversas, como el de La Fenellassa de Beceite.

El 2 de Diciembre de 1998 la UNESCO declara Patrimonio Mundial las Pinturas Rupestres del Arco Levantino por constituir un testimonio único y excepcional de una civilización desaparecida. Es un arte narrativo, ya que son documentos de primera mano que nos describen cómo vivían los pueblos prehistóricos que nos precedieron.

Bajo el título genérico de Arte Postpaleolítico se conocen varios estilos pictóricos: esquemático y levantino, representados ambos en la Comarca del Matarraña/Matarranya. Dentro del estilo Levantino Clásico se representan figuras animales de forma naturalista, de modo que los ciervos, toros, cabras…presiden la roca majestuosamente, seres humanos en actitud de reposo o en movimiento, es decir, a la carrera, siendo muy habituales los arqueros. El estilo esquemático supone la representación plástica con los mínimos elementos formales: hombres y animales quedan reducidos a líneas, con un sentido simbólico-religioso.

La Comarca del Matarraña/Matarranya, gracias a varias ayudas del Ministerio de Cultura, ha podido llevar a cabo diferentes acciones de conservación y puesta en valor del Arte Rupestre Levantino:

  • Aplicación para dispositivos móviles y tablets:


Gracias al escaneado tridimensional de los abrigos y la toma de documentación geométrica y fotográfica y la elaboración de nuevos calcos digitales, restituciones digitales de los motivos rupestres y con la programación y generación de modelos virtuales, se ha desarrollado una aplicación para móviles denominada Matarranya Rock Art, que también se puede ver a través de la página web oficial de la Comarca del Matarraña/Matarranya.

Se trata de una herramienta que permite una inmersión virtual en el tiempo que da la posibilidad al usuario de contemplar, a través de una visita en primera persona, cómo eran las pinturas rupestres en el momento de su creación por los hombres prehistóricos, en el momento de su descubrimiento (principios de siglo XX), y en la actualidad.

Es una aplicación para dispositivos móviles y tabletas (tanto para Android como para IOS) que facilita la realidad inmersita gracias a que la imagen interactúa con el giroscopio del dispositivo y permite tener una vista de 360 grados de las pinturas. Además de contemplar las imágenes, también se pueden consultar gran cantidad de datos referentes a los abrigos.

Este proyecto se ha podido desarrollar gracias a las Ayudas del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.



Enlace a la aplicación 'Matarranya Rock Art'

 

  • Guía Arte Rupestre de la Comarca del Matarraña/Matarranya:

En ella se recogen todas las manifestaciones de arte rupestre de la Comarca del Matarraña/Matarranya con la finalidad de impulsar la difusión y conocimiento de estos bienes declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1998. El libro lo ha escrito el doctor en Prehistoria Manuel Bea, técnico arqueólogo del Área de Prehistoria de la Universidad de Zaragoza tras llevar a cabo un arduo trabajo de investigación desde al año 2008 y el estudio de las pinturas aplicando las nuevas tecnologías digitales, lo que ha permitido obtener unos óptimos resultados, como es la aparición de una nueva figura en el abrigo de las Caídas de Salbime de Mazaleón. El carácter divulgativo de la guía se acentúa con las ilustraciones de David Guirao, que nos ayudan a comprender mejor el Arte Levantino y las gentes que las pintaron.

 

  • Ruta de Patrimonio denominada “Los Primers Pobladors”:

La ruta de Los Primers Pobladors une las localidades de Cretas, Mazaleón, Calaceite y Valdeltormo a través de un histórico recorrido de 47,2 kilómetros.
El recorrido se centra en el Barranco del Calapatar, que transcurre entre los términos de Calaceite y Cretas y desagua en el río Matarraña a la altura del término de Mazaleón, conectando dicha ruta con el sendero de PR que va paralelo al río Matarraña y con la Vía Verde, tanto desde la Estación de Cretas como por su paso por Valdeltormo. Es una ruta que está homologada como itinerario ecuestre, pudiéndose realizar también a pie, en bici, y en vehículos todoterreno (a excepción de varios tramos)

En este caso, el Arte Rupestre nos sirve de excusa para conocer una de las zonas más bellas y originales de España. La ruta nos sumerge en el pasado permitiéndonos disfrutar de un contraste de paisajes naturales de gran belleza ( campos de cultivo de olivos milenarios, vides, y almendros, salpicados por pequeñas manchas forestales, y un paisaje de ribera del río Matarraña) salpicados por numerosos vestigios culturales de diferentes épocas: ermitas, poblados ibéricos, norias, construcciones tradicionales…

La ruta tiene su punto de partida en el término municipal de Cretas, en las proximidades de la antigua estación de la Vía Verde. Partimos en dirección al núcleo urbano, lo atravesamos y continuamos hacia el noroeste, por la pista del Barranco del Calapatar, hasta alcanzar la Bassa d’En Perler –abrevadero. Siguiendo la misma ruta, observamos un ejemplo de las construcciones que fueron de trascendental importancia en la vida cotidiana de nuestros antepasados: la noria, utilizada para extraer agua para los regadíos.
Más adelante, encontramos las pinturas rupestres de La Roca dels Moros y Els Gascons. -declaradas Patrimonio de la Humanidad según la UNESCO- y poco después, observamos otra noria, en este caso, la de la Costa del Calapatar. Seguimos cabalgando hacia el norte entre campos de cultivo de almendros y olivos, donde encontraremos una bifurcación que nos permite tomar los caminos alternativos de Calaceite.
Continuamos por el eje principal hasta encontrar los restos del Poblado Ibérico Els Castellans y el Horno de Cal, en las proximidades de la Font de la Madrillera –abrevadero–, y continuamos hacia el oeste, con un pequeño zigzagueo. De nuevo, y ya en la ribera del río Matarraña, encontramos una variante a la ruta principal. En este caso, nos conduce a Valdeltormo.
Seguimos por el itinerario principal en dirección noreste donde el río Matarraña nos va a acompañar en nuestro camino hacia Mazaleón. Tras pasar bajo el puente, cabalgamos cerca de El Tilo del Molí d’Arnal, un árbol monumental. A partir de aquí dominarán los huertos y campos de melocotoneros. En el último tramo, podemos acercarnos a la ermita de San Cristóbal y al Poblado Ibérico de San Cristóbal. El núcleo urbano de Mazaleón pone punto y final a esta ruta que nos permite disfrutar de un contraste de paisajes naturales de gran belleza, salpicados por numerosos vestigios culturales de diferentes épocas.
Ramal hacia Calaceite (13,5 km)
A unos 7 kilómetros de Cretas, el camino se bifurca y podemos tomar un ramal que va hacia Calaceite entre cultivos de olivos, almendros y vid. Tras pasar el hermoso paraje de la ermita de Santa Ana y la Font d’En Oró –abrevaderos– podemos visitar el Poblado Ibérico del Tossal Redó y la Font de les Espiles –abrevadero–. El punto final de la ruta está en la ermita de San Cristóbal, junto al poblado ibérico de San Antonio, desde dónde se divisan unas vistas espectaculares de toda la Comarca del Matarraña/Matarranya
Ramal hacia Valdeltormo (6,6 km)
Una vez el eje principal llega al río Matarraña, tenemos la opción de coger el ramal que nos conduce al municipio de Valdeltormo pasando por los poblados ibéricos de Torre Cremada y Tossal Montañés y enlazar, si se desea, con la Vía Verde Val de Zafán.

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Descripción de las pinturas rupestres puestas en valor:

Roca dels Moros (Cretas):

En La Roca dels Moros de Cretas, Juan Cabré descubrió en 1.903 tres hermosos ciervos naturalistas de color rojo que presidían el abrigo majestuosamente, acompañados de la figura de un bóvido, y varias estilizaciones humanas, descubriendo un nuevo arte llamado Levantino. Pero mala suerte corrieron las pinturas ya que, según narra J. Cabré, un tejero pretendía volarlas para encontrar un presunto tesoro que estaría enterrado al pie del abrigo, y con la intención de preservar las pinturas, que hasta el momento nunca habían sido objeto de acción vandálica, Cabré las arrancó. Actualmente están expuestas en el Museo Arqueológico de Barcelona.
En la actualidad, junto a las huellas de la extracción de las pinturas, tan sólo se conservan dos estilizaciones humanas a la derecha del hueco que ocupaba el bóvido, así como la parte trasera de un cérvido en la pared derecha, perpendicular al panel arrancado. Y también un arquero levantino y un cuadrúpedo, que formarían una escena de caza. Estas dos figuras fueron descubiertas tras los trabajos de restauración llevados a cabo por E. Guillamet y L. Ballester en el marco del Proyecto “Restauración y Conservación del Arte Rupestre” llevado a cabo por la Comarca del Matarraña/Matarranya.

 

 



Els Gascons (Cretas):

Este conjunto, junto al de “La Roca dels Morors”, inaugura la era de los descubrimientos del Arte Levantino. Fue descubierto en 1908 por el arqueólogo francés Abate Breuil en el barranco del Calapatar de Cretas.  

Las pinturas estaban compuestas por dos grandes ciervos naturalistas superpuestos, uno en rojo y otro en negro, acompañados de otras manifestaciones animales como cabras, bóvidos y un caballo. La novedad con respecto al vecino abrigo de la “Roca dels Morors” es la presencia de la figura humana, representada por cuatro arqueros.

Actualmente solo se conservan dos cabras naturalistas en color negro, con una potente cornamenta, una en actitud de reposo, replegada, y la otra a la carrera. Y parte de un arquero que coge una flecha y el arco en dirección a una de las cabras conservadas, formando parte de una escena de caza.
Fueron arrancadas y destruidas, observándose el negativo de las extracciones. El arranque significó la destrucción de la mayor parte de las pinturas hasta entonces conservadas.

 


Pinturas de La Fenellassa:

El abrigo se ubica en las cercanías del denominado Parrissal, en el corazón de los Puertos de Beceite, en un entorno abierto rodeado de pinares en el que destaca una especie de peñón rocoso a la orilla izquierda del Matarraña. Las pinturas se realizaron en la cara Norte de la acumulación caliza, justo enfrente de una fuente llamada La Fenellassa, de la que recibe el nombre el conjunto.
En el panel se reconocen hasta doce figuraciones de estilo netamente esquemático y de las que ocho resultan reconocibles. El color rojo de las representaciones contrasta abiertamente con la tonalidad amarillenta de la superficie rocosa lo que, unido al relativamente buen estado de conservación de las pinturas, permite discriminar la temática y formación escénica contenida en el abrigo.

Este estilo artístico se desarrolló en toda la Península Ibérica desde el Neolítico e inicios de la Edad de los Metales, y supone la representación plástica con los mínimos elementos formales: hombres y animales quedan reducidos a líneas, con un sentido simbólico-religioso.

Protección y puesta en valor de las Pinturas rupestres ‘Les Caigudes del Salbime’:

       

‘El Salbime’ es el nombre que recibe el barranco que desagua en la margen derecha del río Matarraña. A lo largo de su ladera se conservan vestigios de las distintas culturas prehistóricas que poblaron estas tierras. Se trata de las pinturas rupestres levantinas de ‘Les Caigudes del Salbime’, declaradas Patrimonio de la Humanidad en 1998, atribuibles a grupos de cazadores-recolectores que vivieron en el Epipaleolítico; y de varios túmulos funerarios pertenecientes a las primeras fases de la cultura ibérica (ss. VII-VI a.C.)

Desde la Comarca del Matarraña/Matarranya, y gracias a una ayuda del Ministerio de Cultura para bienes declarados Patrimonio Mundial, se ha llevado a cabo la protección de las pinturas rupestres a través del cerramiento del abrigo y su puesta en valor mediante su señalización y creación del Sendero Local S.L.-TE-19.

A través de esta ruta podemos hacer un viaje al pasado para conocer a los primeros pobladores del Matarraña, permitiéndonos disfrutar de un contraste de paisajes de gran belleza que caracterizan a la comarca: paisaje agrícola, a través de campos de cultivo de olivos salpicados por pequeñas manchas forestales, con predominio del pino carrasco, y el paisaje de ribera del río Matarraña, que en este tramo del cauce discurre lentamente entre la amplia explanada fluvial flanqueada por campos de frutales y chopos, sauces o fresnos entre los que habitan aves acuáticas como la garza, martín pescador y jabalís, liebres o ardillas.

En 1920, el secretario de Mazaleón, Lorenzo Perez Temprado descubre en este abrigo del barranco de Les Caigudes del Salbime dos escenas de pinturas rupestres prehistóricas.

Se trata de unas manifestaciones de Arte Levantino, arte pintado que se extiende por las sierras interiores del arco Mediterráneo peninsular, y que en 1.998 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, por ser testimonio de primera mano de una civilización desaparecida.

Es un arte narrativo en el que se representan escenas de caza, de guerra o rituales que tienen como protagonista a la figura humana. A través de las pinturas rupestres, podemos conocer los modos de vida de estas gentes que vivieron en el neolítico, pero que son cazadores-recolectores, es decir, todavía mantienen una economía basada en la caza y la recolección.

Miles de años después de que fueran pintadas, en 1920, en el momento del descubrimiento, el abrigo estaba formado por dos paneles enfrentados que se unen formando un ángulo. El panel izquierdo estaba compuesto por un arquero y una cierva naturalista en color rojo.

Estas pinturas fueron arrancadas en un momento impreciso posterior a su estudio.

El panel derecho, todavía conservado aunque con una visibilidad muy deficiente, está compuesto por tres figuras humanas también en color rojo de estilo levantino según los recientes estudios de M. Bea:

El motivo 1 (piernas) y el 2 (mitad superior) formarían parte de una única representación humana de la que no se habría conservado la zona medial del cuerpo.
Motivo 3. Representación humana de tendencia al esquematismo orientada a la derecha. La cabeza tiene forma globular y los brazos fueron representados flexionados y hacia adentro (“en jarras”).

Motivo 4. Se correspondería con una figura humana orientada a la derecha y en actitud dinámica.

Acceso a la Intranet de La Comarca del Matarraña.

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